La verdad que esperábamos más de esta tercera gala de Cantando por un Sueño, de los sentenciados les tocó abandonar la competencia al trío formado por Kárcamo, Iván Barrios y la soñadora de Bocas del Toro: Nidia, los que se salvaron fueron Brambri, Manuel Araúz y Maryelis, la soñadora de Chiriquí. En el duelo, lo que más destacó y digo destacó por el tiempo que emplearon, fue el jurado, que en una evaluación kilométrica daba sus puntos de vista con respecto a la presentación de ambos grupos, además de largos y aburridos los comentarios, donde lo único interesante fue cuando Leonte dijo que: “estaba Cabreado” con un marcado acento “españó”, por un momento pensé que me estaba leyendo la mente y se refería al Show completo, pero después aclaro que era por que uno de los sueños debía abandonar la competencia.
Siguió la noche, que me pareció eterna, entre los panameñismos de karen, que decía “tuvo” en lugar de estuvo, por ejemplo, y Jackie que no se le entendía nada de los comentarios que hacía, no se si era por lo rápido que hablaba o por tantas equivocaciones.
Rescatables, si porque no todo puede ser malo, las presentaciones de Gilberto y Judy que hicieron buen trabajo interpretando una salsa y de Maritza y Raquel que interpretaron un merengazo de Las Chicas del Can, en donde no sólo se esforzaron, sino que se vio que lo disfrutaron muchísimo.
Así las cosas, Cantando por un Sueño está pa´ los tigres, una costosa superproducción que si no hace o implementa ideas nuevas no pasará de ser solo eso: “un sueño”… me comentaba un chuzco, como dicen por ahí, a mi no me lo creas yo no lo dije, me lo comentaron “¿será que hace falta Kareen de Farias” para tener una producción de calidad?
Por ahora lo dejamos de ese tamaño y esperemos a ver como viene la cuarta gala.
Ah se me olvidaba los sentenciados de esta semana son: el trío de Oscar, Yamirelis y Cristina y el de Víctor, Cristina y Dania.
Nota: redacción @lahoradelabola
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