Como cuando te dicen: “Sr. González, Sr. González favor pasar por
recursos humanos” y tú dices
#yAhoraQué! Ahhhh!!!!
¿Qué es lo primero que cruza
por tu mente? tu familia, las deudas, los planes, el futuro…
CALMA! Lo importante es saber que
todo no acaba aquí, hay muchas posibilidades ante lo que parece una inminente “catástrofe”,
y es que es en este punto donde debes tener mente y corazón frio.
Primer
error: voy a pagar todas mis deudas con la liquidación. No hay necesidad, las deudas siempre estarán
ahí, cuando no puedas negociar con tu acreedor un plazo más largo o letras más
pequeñas, puedes tomar parte del dinero de la liquidación y prorratearlo
mensualmente para pagar tu deuda, igual que si estuvieras trabajando.
Ante esto, lo más recomendable es calcular los gastos fijos mensuales
que tienes, y los que compartes con tu pareja, y separar el dinero dividiéndolo
en montos mensuales y guardándolo igual que si estuvieras trabajando, así no
tendrás mayor estrés del que puede suponer estar desempleado (que no es lo mismo
que estar sin trabajo, el trabajo ahora es buscar trabajo) y puedes
dedicarte con minuciosidad a encontrar otro empleo.
Segundo
error: dejar toda la liquidación
en el Mall, por Dios, ten en cuenta que ese es tu único capital,
al menos por el momento, aquí vale ser prudente y “gastar” lo menos posible en
cosas que no son prioridad.
Tercer
error: voy invertir “TODO”
mi capital en un negocio, piensa que hay muchos aspectos que
debes tomar en cuenta al invertir, que tipo de negocio vas a iniciar, el
mercado, la competencia y muchos otros factores que podrían influir positiva o
negativamente en tu proyecto de emprendimiento.
Ante esto, analiza las opciones, considera asociarte con
alguien más para que la inversión sea mínima, calcula ¿cuál sería el tiempo de retorno de la inversión?
¿Cuánta sería TU GANANCIA? O también puedes iniciar un negocio con
poca o ninguna inversión económica, es decir trabajar con el dinero del
cliente, negociando con los proveedores crédito por un tiempo definido y cargándole
este coste a tus clientes. Existen múltiples formas de “Hacer negocios”, me decía
un amigo en algún momento: “Quién te dijo que para hacer un negocio necesitas
tener plata, tienes una buena idea, entonces busca alternativas”.
Existen otras alternativas como las redes de
mercadeo, algunas muy lucrativas dependiendo de tu inversión y
el tiempo que dediques a desarrollarlas, son una opción real, conozco varias.
Podríamos
seguir mencionando errores y fórmulas para manejar mejor tus finanzas ante el
imprevisto de quedar sin empleo, lo importante es que tienes que tener presente
que la decisión que tomes afectará no solo tu entorno inmediato (familia, educación,
salud, alimentación, etc.) sino que puede echar al traste tu salud física y
mental. Piensa bien en tu respuesta #yAhoraQué!
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Excelente artículo.
ResponderEliminarGracias! saludos
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